Zamarrones

 

Oleo de Maisan expuesto en el Ecomuseo   Recortes de Prensa:

   Alerta 2009 

   Diario Montañes 2009 

   Diario Montañes 2008

   Diario Montañes 01/02/07

   Alerta 21/02/07 Portada    Alerta 21/02/07    Alerta 27/02/07

   Diario Montañes 10/02/06

  

LOS ZAMARRONES DEL VALLE DE POLACIONES.-

            Uno de las razones fundamentales que impulsó a la Asociación Socio-Cultural Pejanda a la Cartel Zamarrones 2007celebración de los carnavales según las formas tradicionales fue el constatar la importancia que estas fiestas tenían en el ámbito social de este Valle, antes de su paulatina desaparición a partir del año 1.956.

 

            Así lo describe Gomarín Guirado  en su libro «El Carnaval en el Valle de Polaciones» (Santander, 1.987): «… la tarde del Domingo Gordo iniciaba el Carnaval en el Valle de Polaciones. Terminaba en la noche del martes. Todo el valle constituido ya en actor, ya en espectador participaba en el mismo, con la excepción de alguna familia sumida en luto reciente. Incluso los serradores de la madera, que trabajando fuera sienten la llamada de los carnavales, se conceden un permiso y regresan a su comarca para vivir aquellos días memorables, que no venían más que una vez al año…».

 

            Si bien los carnavales como festividad profana estaba prohibidos por decreto desde el año 1.939, en el valle de Polaciones se siguieron celebrando debido a la gran tradición y enraizamiento que tenían entre los pobladores del valle, y quizás protegidos por el propio aislamiento geográfico. Sin embargo los que eran criticados en las comparsas, tenían ya un pretexto para denunciarlos. Por fin en los años cincuenta, y después de pagar una serie de multas, la costumbre de correr los carnavales se fue perdiendo en el valle. De nuevo Gomarín nos señala en la obra citada, el significado de esta fiesta para la juventud de Polaciones: » Correr los Carnavales era para los mozos del Valle de Polaciones colmar una de sus máximas aspiraciones, algo que daba mayor plenitud al concepto de hombría de aquellos muchachos. Vestirse de zamarrón, y sobre todo vestirse de blanco, constituía uno de los actos más relevantes que un hijo de Polaciones podía consumar en su vida. «.

 

 

            Para la Asociación Socio-Cultural Pejanda ha sido muy importante dar a conocer entre los naturales del valle, y sobre todo entre los más jóvenes, el auténtico significado de estas fiestas así Cartel Zamarrones 2006como su organización y dinámica. Creemos que a través de un conocimiento profundo puede ser posible la recuperación de una tradición perdida durante años, pero siempre añorada y viva en el recuerdo de muchos purriegos que de una u otra forma participaron en aquellos antiguos carnavales. Si bien somos conscientes de las diferencias actuales con los tiempos en que se celebraban los carnavales y el nuevo sistema de valores que hacen imposible la repetición en plenitud de aquellas fiestas, al menos ha podido recuperarse la tradición de la representación de una comparsa  con temas referentes a la vida cotidiana del Valle, y con las vestimentas de los zamarrones blancos y negros.

 

        Gustavo Cotera en «El traje en Cantabria», Ed. Cantabria, S.A., Santander-95, hace una pormenorizada descripción de los zamarrones blancos del carnaval purriego:

         «… Ninguno tan peripuesto como los zamarrones blancos del Valle de Polaciones, quintos soldados cuyo aderezo quedaba a cargo de mujeres sabias en la materia; principiaban por endosarles camisa y calzón como la nieve, toscamente bordadas mangas y perneras, mas unas enaguas almidonadas casi ocultas por rico mantoncillo; éste se prendía a los flancos con alfileres relumbrantes y con un broche atrás, dejando caer sus puntas a modo de cola; cruzaban el pecho bandas de seda lazadas al costado, al par que enormes escarapelas de cintas abrían sus rosas en los hombros, introducción moderna y nada favorecedora fueron la repipiada corbata y las polainas militares o leguis, eso si, bien engrasadas con tocino; a la cabeza el sombrerón de mayor tronío que cabría esperar de esta estirpe de serrones y vaqueros; formaba su base uno de aquellos pajeros descomunales, de los de ir a la hierba, forrado exteriormente con blancos pañuelos de seda; alrededor del borde iba una delicada puntilla de a cuarta, sobre la que temblaban flecos de cristal y collares en festón, mientras por dentro, el ala rebullía de cascabeles; armando la copa, unos alambres sostenían monumental pirámide de flores de trapo, hasta abrumar la figura  del zamarrón. Por si no fuera bastante adorno, tornasoladas colonias de tres dedos de ancho, en número de quince o dieciséis, arrancaban de sus respectivas moñas en el borde posterior del ala, flameando a la espalda como llamas de todos los colores…». 

         La recuperación de estos vistosos trajes ha sido posible gracias al estudio de la bibliografía disponible sobre el tema pero también, y quizás en mucha mayor medida, a la labor de  investigación mediante entrevistas a antiguos zamarrones purriegos, quienes en todo momento mostraron su disposición a facilitar toda la información que recordaban sobre los carnavales: Preparación de las canciones de las comparsas, confección de los trajes, recorrido por los pueblos, recibimiento de los vecinos, etc. Todas estas entrevistas fueron grabadas y forman ya parte del fondo documental de la Asociación Socio-Cultural Pejanda. Desde la asociación tenemos que agradecer el trabajo absolutamente desinteresado de los nuevos zamarrones que, sin ningún tipo de ayuda económica, elaboran sus propios trajes, con el coste de dinero y de tiempo que ello les supone. Sin esa colaboración hubiera sido imposible poner de nuevo en marcha y mucho menos consolidar nuevamente esta fiesta en el valle.Cartel Zamarrones 2005

            La espectacular estampa del regio atavío de los zamarrones blancos, contrasta con los calandrajosos y tiznados zamarrones negros, disfrazados con lo primero que encuentran a mano y que son los encargados de escenificar las trovas y comparsas que cada año se componen con temas de la actualidad del valle. Los blancos con sus barrocas galas se sitúan al frente de la comparsa y su principal cometido consiste en aplicar el «sabaneo» a las mozas solteras, que no es otra cosa que salpicarlas de barro y agua con una piel o saco atado a un largo palo que les sirve además para apoyarse en sus saltos y que recibe el nombre de «zamárganu». El ritual es seguido con gran alborozo de chillidos y carreras en persecución de las mozas que acaban siempre chorreando agua. Pero en contra de lo que pudiera pensarse, no sólo no se enfadan, sino que constituye un honor el recibir el sabaneo de los blancos, considerándose más afortunada aquella que ha recibido un mayor sabaneo. Todo esto es para algunos un ritual que se asemeja  a la fiestas Lupercales, que se celebraban en la antigua Roma en el mes de Febrero y en las cuales, los sacerdotes del Dios Pan, se lanzaban a la calle armados de jirones ensangrentados de piel de cabra, flagelando con ellos a las mujeres que se encontraban en su camino para purificarlas y hacerlas fecundas.

 

            Otro de los objetivos que en mayor medida se pretende alcanzar es el de conseguir implicar a un gran número de jóvenes; en este sentido destacamos la participación en la comparsa de todos los niños de la Escuela Pública «Valle de Polaciones». Pensamos que esta puede ser una buena forma de inculcar entre los más jóvenes el interés por el conocimiento de las tradiciones de su pueblo y despertar la inquietud por la conservación de sus raíces culturales. Pensamos que esto será más fácil de alcanzar mediante una actividad lúdica en la que al mismo tiempo se disfrute.  Cartel Zamarrones 2004          

 

La Asociación Socio-Cultural Pejanda, se siente orgullosa de haber contribuido a despertar una tradición perdida durante muchos años y de la cual se sienten igualmente partícipes todos los pobladores del Valle de Polaciones.

 

 

            En los años del máximo apogeo del carnaval purriego, las vacas se quedaban al cuidado de los mayores de la casa, y cuando esto no era posible, sin comida, y la mayor parte de las faenas agrícolas sin hacer. Las criadas de los valles limítrofes se refugiaban en sus pueblos y el valle entero vivía tres días de juerga. Los carnavales eran la fiesta mayor de Polaciones, una fiesta que relacionaba a los pueblos entre sí de una manera amena.

 

 

            En Polaciones las comparsas del carnaval siempre han sido esperadas con gran expectación; los vecinos de los pueblos esperaban encontrar en ellas hechos acontecidos durante el año que eran exagerados y parodiados por los zamarrones. Se organizaban auténticos teatros ambulantes que  cantaban, recitaban, escenificaban y representaban las composiciones. Las comparsas se canturreaban en los meses posteriores, durante las faenas del campo, subiendo a ver el ganado o en las casas durante las hilas, quedando como parte de nuestro patrimonio cultural. Hay que entender las comparsas como una suerte de teatro oral, a modo de anécdotas, si bien en verso resultan más graciosas.

 

 

            Algunas de las comparsas han llegado hasta nosotros por transmisión oral y son muy conocidas, como por ejemplo: «Orejitas» de 1.932, «El duende de Belmonte» de 1.935, «Las panderetas rotas» de 1.940, «Los antiguos y los modernos» de 1.950 o «En busca de dinero» de 1.954, entre otras muchas. Sin embargo gran cantidad de ellas han caído lógicamente en el olvido y de otras muchas sólo quedan pequeños fragmentos. La edición de nuestro libro pretende también preservar todas las composiciones de la nueva etapa y evitar que se pierda alguna de ellas.

 

             PROGRAMA.-                                 Cartel Zamarrones 2003

 

            Es necesario para la preparación del carnaval la reunión de los participantes en un local. En este local se decidirá el tema sobre el que se escribirá la comparsa. Asimismo ese local será el utilizado para dar las instrucciones para la confección de los trajes y para los ensayos de la escenificación de la comparsa que habrá de representarse en todos los pueblos de Polaciones.

 

 

            El día del carnaval, los participantes se reúnen a las nueve de la mañana en Pejanda, dónde les recoge el autobús para iniciar el recorrido, durante todo el día, por los nueve pueblos del valle. La comparsa de los zamarrones va acompañada por una banda de música tradicional, encargada de amenizar el pequeño baile que se hace en cada pueblo.

 

Por la mañana se recorren los pueblos de San Mamés, Belmonte, Cotillos, Salceda, Santa Eulalia y Pejanda. En cada uno de ellos se representará la comparsa del carnaval durante 30-45 minutos y se repartirán entre el público regalos alusivos al valle.

 

Nuestra Asociación creó en el año 2.004, como novedad, el premio anual de ZAMARRON DE HONOR. Con este premio queremos reconocer el trabajo de aquella persona o entidad que, desde cualquier profesión, haya destacado durante el año en beneficio del desarrollo o promoción del Valle de Polaciones.

 

La Asociación Socio-Cultural Pejanda, se siente orgullosa de haber nombrado ZAMARRON DE HONOR del Carnaval de los Zamarrones desde entonces a D. Miguel Ángel Revilla Roiz, a D. Santiago Díaz, al rabelista Chema Puente y el año pasado al investigador etnomusical D. Jesús García Preciado.

 

El acto formal del nombramiento, se lleva acabo el día del carnaval, en Pejanda (Polaciones). Dicho acto consiste en la imposición del gorro de Zamarrón blanco (El elemento más característico de la indumentaria de los zamarrones blancos), y la entrega de un regalo en el que se le acredita como ZAMARRÓN DE HONOR del Carnaval Zamarrones.

 

            Posteriormente se sirve un almuerzo en Pejanda. Por la tarde se sigue el recorrido de los pueblos, se visitan los pueblos de Callecedo, Puente Pumar, Tresabuela, Lombraña, Uznayo y La Laguna, escenificando de nuevo en cada uno de ellos la comparsa del carnaval durante 30-45 minutos y repartiéndose regalos entre el público.

 

            Durante todo el día hay una persona que se encarga de hacer grabaciones de vídeo del desarrollo del carnaval, así como de recoger testimonios e impresiones entre el público y los propios actores. Todo este material  pasa a formar parte de los fondos documentales de la Asociación.

 

Es de destacar el gran recibimiento que, en años anteriores, ha tenido la comparsa de los zamarrones en todos los pueblos, así como la ilusión e interés de quienes lo vivieron en sus manifestaciones tradicionales, por procurar su preservación en la mayor pureza posible. Por ello siempre indican sobre el terreno detalles sobre  los trajes y la propia organización de la fiesta, para procurar su perfeccionamiento de año en año.

 

            A las nueve de la tarde se sirve una merienda para todos los participantes. Seguidamente, se inicia el coloquio, con la participación de antiguos zamarrones del valle, quienes explican el significado de aquellas fiestas y refieren diversos detalles y anécdotas, que resultan de sumo interés humano y etnográfico. 

 

  

LA PUESTA EN VALOR DEL PATRIMONIO CULTURAL.- 

 

     Cartel Zamarrones 2002     En los últimos años se están produciendo importantes cambios en la economía mundial, los cuales explican en buena medida la transformación que se está produciendo en la realidad social y económica. La universalización que ha tenido lugar explica que se compita en una economía cada vez más global, que a su vez conlleva la exigencia de que sea necesario optimizar los recursos propios. Es de esta manera como ha ido naciendo el concepto de recursos alternativos, provenientes del buen uso que es necesario hacer de los bienes que se encuentran a disposición de las comunidades humanas. Un aprovechamiento mesurado y racional de los mismos garantizará el bienestar de las generaciones venideras. La vieja idea de que el crecimiento económico depende del capital monetario ha dejado paso a otra que contempla otros muchos bienes capaces de producir una sustanciosa rentabilidad.

         En esta coyuntura comienza a aparecer en el discurso intelectual una serie de conceptos que a pesar de ser muy recientes los consideramos fundamentales por su gran fuerza operativa. Es el caso de los recursos renovables, el desarrollo sostenible, el coste medioambiental, los recursos alternativos, los recursos humanos y otros muchos.

        Entre estos recursos que ahora se capitalizan se encuentran los llamados bienes patrimoniales, en cuanto pueden convertirse en auténticos motores del desarrollo de las comunidades humanas. El patrimonio cultural posee un extraordinario relieve por cuanto es un bien social, que se hace patente en una serie de elementos naturales y culturales, heredados por cada generación de las generaciones anteriores, y que ha de ser transmitido y acrecentado en la medida de lo posible a las generaciones venideras.

 

El patrimonio de esa sociedad ha de ser entendido como un valor emergente, dotado de una significación y de una rentabilidad. Eso significa que para que el patrimonio cultural sea tal debe ser asumido por quienes lo usan y por quienes lo disfrutan. Difícilmente puede obtenerse un rendimiento de algo que no es apreciado por quienes ostentan su titularidad. Dentro de nuestra región, todas sus comarcas poseen el necesario potencial para hacer posible esta vigorización del patrimonio, pero acaso difícilmente puedan encontrarse otras que mejor aúnen la excelente oferta que representa un patrimonio cultural de carácter tradicional con otro de índole natural como las situadas en el Occidente montañoso de Cantabria. En este sentido, el Valle del Nansa y Polaciones, reúnen a la perfección los requisitos necesarios para que estos deprimidos municipios del Sur de nuestra región puedan hacer de su inmenso patrimonio un imparable manantial de recursos que pueda convertirse en el antídoto necesario para hacer frente al intenso envejecimiento de su población y a la inmensa despoblación que vive.

 

Esta idea del patrimonio  como un factor que debe potenciar el desarrollo económico y social es una línea de trabajo que puede producir resultados altamente satisfactorios, y así se pone de relieve cuando se comprueba el revulsivo que ha supuesto en zonas montañosas desfavorecidas. Un buen aprovechamiento de este recurso, supone su revalorización de forma útil y responsable, de cara a un futuro que más que ser incierto no existiría de no ser por la posibilidad que se abre por esta vía, capaz de atraer sobre sí los dos conceptos básicos de todo progreso: crecimiento y desarrollo. El llamado desarrollo sostenible Se quiere poner aquí el énfasis en que el patrimonio cultural es un recurso social, y también, como se ha dicho, un recurso económico. Por eso, dadas las características especiales del patrimonio, dotado de un profundo sentido simbólico, resulta claro que su impulso económico debe llevarse a cabo bajo principios basados en el respeto y en la responsabilidad. Como recurso económico, y en combinación con otros recursos, puede cobijar valiosos yacimientos de empleo, suscitar iniciativas empresariales innovadoras e impulsar procesos de desarrollo de los que tan necesitados están las áreas periféricas como Polaciones.

 

 

En el convencimiento de la plena validez de estas premisas, es en la que enmarca el impulso que la Asociación Sociocultural Pejanda ha dado a la recuperación de los Carnavales según las formas tradicionales, una vez constatada la relevancia social de estas fiestas en el ámbito social del Valle, antes de su progresiva pérdida de pujanza a partir de los años 50.Cartel Zamarrones 2000

 

A nuestro juicio, el principal objetivo que nos ha conducido a la celebración arraigada de nuevo en Polaciones, se ha visto cumplido. Es el momento de avanzar en el proceso de reconocimiento de una de las celebraciones más arcaicas de nuestra región. Por ello, y como preámbulo al décimo aniversario de la plena recuperación de los zamarrones purriegos, que tendrá lugar en el año 2.008, y con un claro interés de difusión de nuestro patrimonio Etnográfico, esta asociación se enfrenta al reto de dotar al Valle de una publicación que recoja la evolución de esta celebración en los últimos años. Como ya hemos apuntado es fundamental dejar constancia por escrito en un libro de todo lo representado en estos años, ya que hemos comprobado que las hojas sueltas van desapareciendo con el paso de los años.

 

De esta forma se elaborará un documento que va a servir para el conocimiento y la promoción de una forma de vida y una fiesta absolutamente singular y particularmente interesante desde el punto de vista etnográfico. Este documento se va a poner a disposición de cualquier colectivo interesado en el conocimiento de otras formas culturales ya desaparecidas o en peligro de hacerlo. Se procurará así la transmisión de la cultura purriega a otras zonas mediante un medio fácilmente transportable y se dejará constancia mediante un documento gráfico y paliará en lo posible la progresiva pérdida de la identidad cultural del Valle de Polaciones.

Traje Zamarrón Blanco

Para ver la descripción del traje de Zamarrón blanco pincha sobre la imagen.

 

 

8 respuestas

  1. Enhorabuena Zamarrones.

    Polaciones zamarrones que vestis a pierna entera, unos a media polaina otros a polaina entera…
    Un saludo y aunque mi persona no podra estar por cuestion laboral , si estara mi alma y ese sentimiento que me une tanto a esa tierra.
    Mis mejores deseos

  2. fgttykuvbfds

  3. Hola, he visto que acabáis de sacar un libro sobre las comparsas desde 1987-2007 y me gustaría comprarlo, pero no se donde.
    He preguntado en varias librerías de Santander y no saben nada.
    Me podéis de ir dónde se pude comprar??
    Saludos.

  4. Os adelantamos, aunque pondremos más detalles dentro de unos días, que la presentación del libro en Santander se realizará el próximo 12 de Marzo en el Corte Ingles.
    De todas maneras, si estáis interesados en tenerlo cuanto antes, se puede pedir contra reembolso poniéndose en contacto directamente con la asociación: asociacionpejanda@hotmail.com

  5. Acabamos de descubrir este Blog y lo seguiremos con interés desde nuestra web de turismo de Cantabria http://www.tourcantabria.com, saludos purriegos¡!

  6. wow! y yo que me apellido Zamarrón estoy sorprendida e impresionada con esta información. Vivo en los estados unidos americanos mas se que el apellido Zamarrón viene de entre españa y francia. los Zamarrón son blancos, ojos de color mas no altos… y segun mi abuelo puede que tambien hayan sido judios. es muy interesante saber que existen tradiciones llamadas como el apellido, me pregunto ¿que fue primero, el apellido o esta tradicion?

  7. […] En Polaciones, valle de Cantabria, se celebra cada año la tradicional fiesta de los carnavales, allí conocidos como Zamarrones […]

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